El acuerdo con Eric Sevilla por la dirigencia estatal, y la molestia con el gobernador. La inminente mudanza del alcalde de Toluca y Eruviel Ávila.
Después de meses de una intensa propaganda a favor de la supuesta inevitabilidad de los Gobiernos del PRI, la realidad se ha impuesto en el Estado de México y son los propios priistas quienes comienzan a advertir movimientos ante la nueva normalidad: la 4T llegó.
Desde las entrañas del Comité Directivo Estatal (CDE), a raíz de una severa crítica contra la actuación de Alfredo del Mazo, preparan a su estructura para que el tsunami de Delfina Gómez no los arrastre, como ocurrió en Hidalgo con la llegada de Julio Menchaca: el PRI no desapareció sino que fue engullido por la 4T, y hoy Morena dirige a aquellos priistas.
Personajes cercanos a la dirigencia estatal compartieron a esta redacción con estricta reserva que la diputada federal Ana Lilia Herrera buscará la dirigencia estatal del PRI cuando concluya el periodo de Eric Sevilla. Una de las peticiones que hizo para respaldar la postulación de Alejandra del Moral, quien fracasó pese a la coalición de oposición.
Con este propósito a cuestas, Ana Lilia comenzó a reunirse con liderazgos claves del PRI en tierras mexiquenses y lo que ha visto no es alentador. Molestia con Del Mazo, pesimismo ante el empoderamiento de Morena, reproches por no postularse a la gubernatura como lo propuso Alito Moreno Cárdenas y, sobre todo, una inminente hemorragia en su partido.
“El PRI no sabe ser oposición”, explicó a LPO una de las fuentes consultadas. Y da nombre y seña de la mudanza para seguir en el presupuesto: el alcalde de Toluca, Raymundo Martínez, ofreció su operación política a Delfina; y el senador Eruviel Ávila, recién renunciado al tricolor, no descarta trabajar mano a mano con el senador Higinio Martínez.
Esto luego del cambio de bando del Partido Verde mexiquense, donde la familia de Luis Miranda acuerda con Mario Delgado la conformación de listas de distritos electorales. Ante una inminente desbandada, con traidores a diestra y siniestra, la diputada Herrera ya mandó el mensaje al gobernador Del Mazo: el PRI se queda en manos de los priistas.